10 May ¿Cómo hacer un desamiantado?
En un proceso de desamiantado, se llevan a cabo diferentes fases, como el envasado y etiquetado, la recogida, el almacenamiento, el transporte de amianto y, finalmente, el tratamiento en un vertedero autorizado. ¿Pero cómo se realizan estas actividades críticas? ¡Sigue leyendo y descúbrelo! Todo el proceso debe ser ejecutado por una empresa de desamiantado especializada para garantizar la seguridad y el cumplimiento de la normativa.
¿Cuando hay que hacer un desamiantado?
Se debe llevar a cabo un desamiantado cuando se identifica la presencia de materiales que contienen amianto en un edificio o estructura y existe un riesgo de exposición. Esto puede ocurrir en varias situaciones, incluyendo:
- Durante Renovaciones o Demolición: Antes de llevar a cabo trabajos de renovación o demolición en un edificio que contiene materiales de amianto, es necesario realizar un desamiantado para eliminar de manera segura estos materiales y evitar la liberación de fibras de amianto en el aire.
- Daños o Deterioro: Si los materiales que contienen amianto están dañados, desgastados o deteriorados, existe un mayor riesgo de liberación de fibras de amianto al ambiente. En estos casos, es importante realizar un desamiantado para eliminar o encapsular los materiales de manera segura.
- Preparación para Trabajos Posteriores: Si se planean futuros trabajos en un edificio que involucran la manipulación de materiales cercanos al amianto, es esencial llevar a cabo un desamiantado previo para garantizar la seguridad de los trabajadores y evitar la contaminación.
- Cumplimiento de Regulaciones y Normativas: En muchos países, existen regulaciones y normativas estrictas sobre el manejo y eliminación de materiales que contienen amianto. Por lo tanto, un desamiantado puede ser necesario para cumplir con estas disposiciones legales.
- Venta o Alquiler de Propiedad: En algunos casos, para cumplir con los requisitos legales y éticos, es necesario realizar un desamiantado antes de vender o alquilar una propiedad que contiene materiales de amianto.
Recuerda que cualquier trabajo de desamiantado debe ser realizado por profesionales certificados y capacitados en la gestión de amianto para garantizar la seguridad de todas las partes involucradas. Siempre es recomendable consultar a expertos en casos de duda sobre la presencia de amianto y la necesidad de desamiantado.
Fases de un desamiantado: Guía Completa
La retirada de amianto es un proceso delicado y complejo que debe seguir una normativa estricta para garantizar la seguridad tanto de los trabajadores como del entorno. El amianto, conocido por sus propiedades aislantes y durabilidad, ha sido utilizado en diversos materiales de construcción, pero hoy se sabe que puede ser extremadamente peligroso para la salud. Por esta razón, es fundamental contar con empresas especializadas en desamiantado para llevar a cabo este proceso de manera adecuada.
En este artículo te explicamos, paso a paso, el proceso de desamiantado, los requisitos legales que deben cumplirse, las fases del trabajo y los roles de las empresas de desamiantado y otros actores involucrados en el proceso.
Identificación del Material con Amianto
El primer paso en cualquier proceso de desamiantado es identificar si el material que se va a manipular contiene amianto. Esto puede parecer evidente en algunos casos, ya que los expertos suelen reconocer el amianto visualmente. Sin embargo, para mayor certeza, es necesario realizar un análisis de laboratorio. Las empresas de desamiantado cuentan con los recursos para hacer esto, tomando muestras de los materiales sospechosos y enviándolas a laboratorios homologados.
La uralita es uno de los materiales más comunes que contiene amianto. A menudo se encuentra en techos, tuberías y otras estructuras, y debe ser analizada con especial cuidado, ya que, en su descomposición, puede liberar fibras peligrosas al aire.
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Elaboración del Plan de Trabajo
Antes de comenzar con el desamiantado, es imprescindible elaborar un Plan de Trabajo. Este plan debe detallar cómo se va a realizar el proceso de retirada, las medidas de seguridad que se van a tomar, los Equipos de Protección Individual (EPIs) que utilizarán los trabajadores, así como los métodos para la manipulación y el transporte de amianto.
El Plan de Trabajo es obligatorio y debe ser aprobado por la autoridad competente en la comunidad autónoma correspondiente. Dependiendo de la magnitud de la obra, puede ser un plan general (para trabajos menores) o específico (para trabajos más grandes o complejos). Si se presenta un plan específico, la aprobación puede tardar hasta 45 días hábiles.
Aprobación del Plan de Trabajo
Una vez elaborado el Plan de Trabajo, debe ser presentado ante la autoridad laboral correspondiente. Esta autoridad revisará el documento y, si está conforme con la normativa vigente, lo aprobará. Sin embargo, si el plan tiene alguna deficiencia o no cumple con los requisitos legales, puede ser rechazado o retrasado. Solo después de recibir la aprobación, la empresa de desamiantado podrá comenzar el proceso de desamiantado de forma oficial.
Preparación de la Zona de Trabajo
Antes de iniciar el desamiantado, es fundamental preparar adecuadamente la zona de trabajo. Esto implica:
- Vallado y señalización: La zona debe ser completamente delimitada y señalizada para evitar que personas ajenas al proceso entren en la zona peligrosa. Es crucial que se impida el acceso a trabajadores no autorizados.
- Cabinas de descontaminación: Para proteger a los operarios de cualquier posible exposición al amianto, se debe disponer de una cabina de descontaminación. Este equipo es fundamental para mantener a los trabajadores seguros durante el proceso de manipulación.
- Burbujas de contención: En trabajos en interiores, es común utilizar burbujas de contención. Estas son estructuras temporales que encierran el área de trabajo para evitar la propagación de fibras de amianto a otras áreas del edificio.
Desamiantar o Retirar el Amianto
La retirada de amianto es el paso clave del proceso y debe ser realizado por una empresa de desamiantado especializada y con experiencia. Los trabajos deben llevarse a cabo con sumo cuidado para evitar la liberación de fibras de amianto en el aire. El proceso de retirada debe seguir las normativas vigentes, usando los EPIs adecuados, como trajes de protección, mascarillas con filtros HEPA y guantes.
En el caso de materiales como la uralita, que suelen encontrarse en techos o estructuras en malas condiciones, es vital encapsular el amianto antes de retirarlo. Esto impide que las fibras se liberen al ambiente durante el proceso de desamiantado.
Si el trabajo implica demolición, es recomendable que la uralita sea retirada antes de comenzar la demolición para evitar que las fibras de amianto se liberen al aire debido a la destrucción de los materiales.
Envasado y Etiquetado del Amianto
Una vez que se ha retirado el amianto, el siguiente paso es envasarlo adecuadamente para su transporte. Los residuos de amianto, incluidos los materiales de protección como trajes y mascarillas, deben ser depositados en **recipientes estancos** que impidan cualquier fuga de fibras. Estos recipientes son, generalmente, bolsas de polietileno reforzadas, que deben ser etiquetadas correctamente con la señalización adecuada que indique que contienen material peligroso.
El almacenamiento temporal de estos residuos, si es necesario, debe realizarse en un área claramente señalizada, que esté separada de otros residuos y que cumpla con los requisitos de seguridad exigidos por las autoridades.
Transporte de Amianto
El transporte de amianto debe ser realizado por una empresa especializada y registrada en el Registro de Empresas con Riesgo de Amianto (RERA). El transporte debe seguir las normativas internacionales, como el Acuerdo Europeo sobre transporte de mercancías peligrosas (ADR). Las fibras de amianto deben ser transportadas en vehículos adecuados, y los paquetes con amianto no pueden apilarse con otros materiales.
Es esencial que el transporte se haga en el menor tiempo posible para minimizar cualquier riesgo de exposición a las fibras de amianto.
Vertedero Autorizado
El último paso en el proceso de desamiantado es el depósito de los residuos en un vertedero autorizado para amianto. Estos vertederos cuentan con las condiciones necesarias para almacenar los residuos peligrosos de forma segura, sin riesgo de contaminación ambiental.
Los residuos de amianto deben ser enterrados en áreas específicamente diseñadas para este propósito. Además, es importante que la zona de depósito esté cerrada adecuadamente para evitar que personas no autorizadas tengan acceso a ella después de que se complete el proceso.
Certificado de Eliminación de Amianto
Una vez que los residuos de amianto se han depositado en el vertedero autorizado, se emite un **certificado de eliminación de amianto**. Este certificado es un documento oficial que garantiza que el amianto ha sido retirado de manera segura y se ha gestionado correctamente. Este certificado debe ser entregado a la empresa que encargó el proceso de desamiantado, como prueba de que el trabajo se ha completado de acuerdo con la normativa.
Conclusión
El proceso de desamiantado es complejo y debe ser llevado a cabo por una empresa de desamiantado especializada, siguiendo todas las normativas y procedimientos establecidos para garantizar la seguridad y la protección tanto de los trabajadores como del medio ambiente. Desde la identificación del material hasta el vertido final en un vertedero autorizado, cada fase del proceso requiere atención y cumplimiento riguroso de la legislación. Si estás considerando la retirada de amianto, es fundamental que cuentes con los servicios de profesionales capacitados y experimentados para manejar este tipo de residuos peligrosos de manera segura.
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